Mujer asesinada en Merlo, por Mauro Alvarez

Y ahí estaba, cubierto de un inquieto e insinuante silencio que de una manera vacilante se desarrollaba en la creciente noche. Mis ojos se desorbitaban ante tan horrorosa imagen, era una hermosa noche para que tan horrorosa situación tuviese lugar. Llorando, con su cuerpo firme y plasmado en el suelo como un muerto, se gestaba una figura a gritos en su cara, que pedía ayuda, estirando su mano hacia mí en busca de un refugio salvante y misericordioso en una falsa ilusión de salvación.
Fríamente él posaba, en busca de continuar su acto y desdichadamente, ella gemía de dolor en una manera que se esparcía por todo el silencioso barrio. Inquietamente yo me preguntaba ¿por qué? ¿Qué había hecho esa pobre mujer para merecer eso? ¿Quién es ese hombre y porque hace esas cosas?.
Paralizado, me escondí detrás de un auto, solo éramos yo, mi soledad y mi temor ante tan horrorosa imagen que se desarrollaba en el barrio durante la joven noche, ¿por qué tenía que presenciar esto yo? Tan solo era una noche común y corriente en la que volvía de cumplir mi día laboral, no deseaba otra cosa que llegar a mi casa a dormir.
Me encontraba acorralado por mi propio temor, no sabía si llamar a la policía, esconderme y seguir presenciando el acto o tan solo huir, pero no podía hacerlo, no era correcto y mi conciencia tan solo me mataría por dentro, me destrozaría con el pasar del tiempo así que opté por llamar a la policía y escabullirme de esta maldita escena; me fui a mi casa y me acosté a dormir con la esperanza de despertar y que todo esto solo haya sido un mal sueño pero, lamentablemente, no había sido así y todo había sido verdad, lo comprobé cuando en la mañana siguiente me senté ante el televisor y en el noticiero aparecía “Mujer asesinada en la zona de Merlo” y me quedé frio ante esa espeluznante noticia.